Es muy temprano todavía lo que pueda suceder en las elecciones del año 2020, pero tampoco es muy tarde, los tiempos en política no dependen solamente de lo que dice el calendario, estarían llegando primero elecciones internas en los partidos a fin de recomponer sus fuerzas a tiempo, y dar a sus bases el empoderamiento que demandan, esto desencadenaría un sinnúmero de situaciones que no están ni salen al tapete con los diferentes conflictos internos y externos que viven la mayoría de los partidos políticos en nuestro país, que aún no cuenta con una ley de partidos políticos que regule el funcionamiento de los mismos, aunque se debaten los detalles para dar por cerrado ese capítulo.
En lo concerniente al PLD, partido al que orgullosamente pertenezco, no me cabe la menor duda de que los aprestos que desde allí se hacen, van encaminados junto a los mejores intereses de la mayoría de los dominicanos.
Los nuevos actores que han resurgido en la atmosfera del país sin duda alguna le han puesto un poco de chispa al ambiente político actual, al cual los partidos tendrán que ponerle especial atención, ignorarlos seria un grave error, en la pasada campaña electoral vimos como muchos jóvenes y nuevos actores emigraron de su partido por inconformidades generadas y vulnerando, en algunos casos, el legítimo derecho de someterse al escrutinio de sus bases y socavando el derecho de ser elegibles, algunos lograron su objetivo político, llegando a alcanzar diversos puestos electivos y posicionarse ante la sociedad que cada vez es más exigente.
Todo esto tomando en cuenta que un segmento importante de la sociedad tiene la percepción de que el sistema de partidos se encuentra en la actualidad en el mayor de sus rezagos y que estos tienen el reto de renovar su imagen y su liderazgo de forma tal que puedan adaptar su enfoque a un entorno social que demanda cada vez más transparencia y eficiencia, tareas en las cuales las nuevas generaciones son las llamadas a jugar el rol protagónico.
“Gobierna y decide la vieja generación, pero es la nueva la que sufre las consecuencias. Y la que, también, puede responder −y responde− con viejas y nuevas acciones, en la calle y en la Red, más conectados que nunca”. Autor: Antoni Gutierrez-Rubi.
Los nuevos actores tienen sobre sus hombros el reto de adecuar cada vez más y de manera impostergable el quehacer político a las demandas de una sociedad cada vez más informada y empoderada, gracias al nuevo mundo tecnológico que tenemos en nuestras manos a través del internet y las redes sociales.
“Muchas personas ven las cosas tal como son y se preguntan ¿Por qué? Yo las veo como pueden ser, y me pregunto ¿Por qué no?”
Robert Kennedy